Lo siguiente se aplica a las empresas de todos los formatos y tamaños: el éxito depende de la gente que se contrata.
¿Qué deberá hacer la persona?
Quizás crea que tiene una buena idea de las responsabilidades del cargo para el que busca un candidato y comience directamente el proceso de entrevistas sin analizarlo demasiado. Pero luego muchas veces se quedará pensando si tomó la decisión correcta. Es muy importante definir claramente las expectativas antes incluso de iniciar el proceso de búsqueda.
Tómese el tiempo para analizar seriamente las obligaciones del cargo. Comience haciendo una lista de las tareas cotidianas que deberá cumplir el candidato. Luego haga una lista de las expectativas que usted tiene en cuanto a las responsabilidades de largo plazo. Y, por último, defina con precisión cómo espera que el candidato se encargue de proyectos, proponga ideas y tenga iniciativa en el futuro. Este proceso le permite concentrarse en los detalles necesarios y también tener una perspectiva general. Además, lo ayuda a definir de antemano con claridad las expectativas. Cuanto mejor comunique sus expectativas desde el comienzo, mejor podrán usted y su candidato evaluar si se trata de la elección correcta.

No hacer reuniones un día laboral

Esta es una propuesta ambiciosa, pero si compañías como Asana, con más de 100 empleados, pueden gestionar esto de forma exitosa con un “Día Sin Reuniones”, seguramente tu compañía también podrá. Esta es una decisión que debe ser apoyada por la alta dirección y ser implementada por la organización al completo. Si estás en una posición en la que puedas recomendar este tipo de política, comienza a tener conversaciones con la gente correcta.

Si no eres lo suficientemente afortunado como para trabajar en una organización que implemente este tipo de política, comienza por establecer en tu propio calendario un día sin reuniones, anima a los miembros de tu equipo a establecer reuniones contigo en otro momento. Tu ejemplo puede inspirar a otros a implementar sus propios días sin reuniones.

Curriculum Universal
La poca proligidad en las postulaciones se refleja en que se utilice el mismo currículum para todos los cargos, sin el menor interés por entender qué es lo que se está pidiendo, cuáles serían los elementos más relevantes para obtener el cargo.
Y es más, es usual tener un resumen de carrera en que el profesional hace de todo, además es proactivo, con buenas relaciones interpersonales y trabaja bajo presión; los típicos clichés que no aportan.
Cuando envíes un currículum piensa primero en qué espera recibir la persona al otro lado, qué espera encontrar, y en base a eso escribe tu currículum, enfatizando lo relevante para el cargo.

No hacer seguimiento
Las abuelitas decían el que la quiere la consigue. Y es así, la perseverancia en la búsqueda de trabajo es clave. Es común, sino muy común, que sean pocos los que hacen seguimiento luego de las entrevistas, muchas veces se quedan en el yo te aviso cualquier cosa de la empresa o la consultora. Y si pasa un mes se da por perdida la opción. Quedarse solo reclamando porque no se les avisó es reflejo de una pasividad brutal. Uno es dueño de sí mismo y si no te llaman, llamas tú!! Los cargos se caen por reestructuraciones, cambios de perfiles, división de tareas, etc.y no porque no seas tan bueno. Y si se contrató a otra persona, da lo mismo, siempre es bueno mantener los canales de comunicación abiertos (sin ser catete). Que uno esté en la mente de las empresas o consultoras permanentemente puede dar excelentes frutos. En el fondo, debes aprovechar de hacer crecer tu red además de mostrar interés por el cargo.