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Hoy en día la mayoría de los asados tiene lugar en el horno y ofrece un método rápido de porciones tiernas de carne, pollo y pescado.

Tu quieres empezar con un horno que esta precalentado a temperatura alta para sellar la carne y así evitar la perdida de jugos mientras al mismo tiempo se está caramelizando la superficie.

Después de 10-20 minutos baja más la temperatura y continúa asando hasta que esté hecho.

Algunas carnes van a requerir que se las humedezca para evitar que se sequen mientras que algunos cortes como la carne de cerdo son lo bastante grasosas y no van a requerir que se las humedezca.

Algunas veces es necesario el amarrar trozos de grasa como tocino a la superficie de lo que estás cocinando para ayudar a darle humedad.

Las aves se deberían cocer con la pechuga hacia abajo para empezar y luego terminadas por el otro lado para permitirle a los jugos y la gordura el fluir dentro de la carne de la pechuga.

Asegúrate de tener una fuente para asar que sea de la medida correcta para lo que estás cocinando. Demasiado grande… y la comida puede quemarse, si es demasiado pequeña y tu asado puede pegarse a los lados de la fuente. Demasiado poco profunda y tu horno se puede volver un desastre, demasiado profunda tu comida se va a cocer al vapor, no asarse.