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Permanece abrigado y descansando. El quedarse abrigado y descansando cuando empieza con un resfrío o la influenza ayuda a tu cuerpo a dirigir su energía hacia la batalla del sistema inmune. Esta batalla agota al cuerpo. De manera que ayúdale un poco tendiéndote debajo de una frazada.

El hacer gárgaras puede humedecer una garganta adolorida y traer un alivio temporal. Prueba una cucharadita de sal disuelta en agua caliente, cuatro veces al día. Para reducir la picazón en tu garganta, prueba una gárgara astringente, como el té que contiene tanino, para endurecer las membranas, o usa una gárgara mas espesa hecha de miel, es decir; filtra una cucharada de hojas de frambuesa o de jugo de limón en agua caliente, mezcla con una cucharadita de miel, deja que la mezcla se enfríe a temperatura ambiente antes de hacer la gárgara.

Bebe líquidos calientes. Los líquidos calientes alivian la congestión nasal, previenen la deshidratación y alivian las membranas inflamadas incómodas que cubren tu nariz y garganta. Si tu estas tan congestionado tu no puedes dormir en la noche, prueba un ponche calienten un remedio antiguo. Haz una taza de té de hierbas, agrega una cucharada de miel y un chorrito de whiskey o bourbon. Limítate a uno, demasiado alcohol inflama esas membranas y es contra productivo.