Clasificación: Dejar las Adicciones

El Involucrarse en la vida de sus hijos es una herramienta esencial para combatir la droga en su familia.
Los niños que son cercanos a sus padres son menos probables de que se comprometan en comportamientos riesgosos. Mientras más involucrado estés en la vida de tus niños, más valorados ellos se sentirán y es más probable que ellos vayan a estar para responderle.
1. Establece “un tiempo juntos.” Establece una rutina semanal regular para hacer algo con tu hijo. Incluso algo tan simple como salir por un helado.
2. No temas preguntar a donde van tus hijos, con quien van a estar y que van a estar haciendo. Conoce a los amigos de tus hijos y a sus padres para que estés familiarizado con sus actividades.
3. Trata de estar allí después de la escuela cuando tu hijo llega a casa. La “zona de peligro” para el uso de droga es entre las 4 y las 6 PM cuando nadie esta cerca, arregla un horario flexible en el trabajo si puedes. Si tu hijo va a estar con amigos, idealmente que ellos tengan la supervisión de un adulto. No sólo un hermano/a mayor.
4. Coman juntos tan a menudo como puedan. Las comidas son estupendas oportunidades para hablar sobre los acontecimientos del día para relajarse (desarrollarse), reforzar los lazos Estudios muestran que los niños cuyas familias comen juntas al menos 5 veces a la semana son menos probables de estar involucrados con drogas o alcohol.
¿Sabes cual es el grupo de música favorito de tus niños? ¿Qué es lo más en onda en la escuela? Mientras más te comunicas, tu hijo se sentirá más tranquilo al discutir sobre drogas y otros temas sensibles contigo.
1. Debes ser absolutamente claro con tus niños, que no quieres que ellos estén usando drogas, nunca en ninguna parte. No dejes espacio para las interpretaciones y a menudo habla acerca de los peligros y resultados del abuso de drogas y alcohol. Ni una o dos veces al año lo harán.
2. Debes ser mejor para escuchar. Haz preguntas y anímalos parafrasea lo que tu hijo te dice. Pide su opinión sobre decisiones familiares. Mostrando tu voluntad para escuchar hará que tu hijo se sienta más cómodo para abrirse contigo.
3. Da respuestas honestas. No inventes lo que no sabes, ofrece investigar al respecto. Si te preguntan si alguna vez haz tomado drogas, permíteles saber lo que es importante, que tu no quieres que ellos usen drogas.
4. Usa reportajes de TV, comerciales antidroga, noticias o discusiones escolares sobre las drogas para ayudarlos a introducir la materia en una forma natural, no forzada.
5. No reacciones en una forma que vaya a cortar cualquier discusión mayor, si tu hijo hace comentarios que te desafían o choquean, transforma esto en una discusión calmada de la razón porque tu hijo piensa que la gente usa drogas o si el efecto vale el riesgo.
6. Haz un juego de roles con tu hijo y practica formas para rechazar las drogas o el alcohol en situaciones diferentes. Reconoce cuan duros estos momentos pueden ser.