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La leche de cabra es deliciosa con un leve dulzor y algunas veces con una pizca de sabor salado. La leche de vaca es la leche de elección en la mayoría del mundo, pero la leche de cabra se puede encontrar en tiendas especializadas en productos naturales.

La leche de cabra es una buena fuente de calcio y una buena fuente de proteína, fósforo, riboflavina (vitamina B2) y potasio. Tal vez en mayor beneficio de la leche de cabra, sin embargo es que alguna gente no puede tolerar la leche de vaca pueden beber la leche de cabra sin ningún problema. La alergia a la leche de vaca se ha encontrado en mucha gente con condiciones tales como infecciones al oído recurrentes, asma, eczema e incluso artritis reumatoide. El reemplazar la leche de vaca con la leche de cabra puede ayudar a reducir algunos de los síntomas de estas condiciones.

La leche de cabra puede algunas veces incluso ser usada como un reemplazo para la leche de vaca en las que se basan las formulas de leche para los bebés, para quienes tienen dificultades con los productos lácteos. Desafortunadamente, a la leche de cabra le faltan muchos nutrientes que son necesarios para el crecimiento de los bebés, así que los padres interesados en probar la leche de cabra en lugar de las formulas para bebé de leche de vaca deberían preguntarle a su pediatra por recetas y formas para agregar a estos nutrientes importantes y vitales. Para los niños mayores y adultos, sin embargo, la leche de cabra puede ser una alternativa rica en calcio excelente a la leche de vaca, ya que además del calcio esta tiene mucho de los mismos nutrientes que se encuentran en la leche de vaca.