Clasificación: Salud > Prevención

El sol tomado con moderación (5-10 minutos son suficientes), es antidepresivo, favorece la formación de vitamina D, ayuda a asimilar el calcio y refuerza el sistema inmunológico. Tomar sol sin protección reseca la piel, acelera la aparición de arrugas. El envejecimiento y puede llegar a producir cáncer de piel.

La recomendación médica de protegerse de los rayos solares debe seguirse al pie de la letra, pues el 80% del daño por quemaduras en la piel se produce antes de los 18 años.

El sol es dañino porque emite radiaciones ultravioletas (UV) que dañan la piel en forma progresiva. Dentro de este grupo se encuentran los rayos UVA que penetran en el tejido causando inmuno supresión y envejecimiento crónico de la piel, además estos son responsables de la formación de radicales libres y de reacciones fototóxicas y fotoalérgicas.

Por su parte los rayos UVB penetran dentro de las más profundas capas celulares de la epidermis y son los principales causantes de las quemaduras de sol, alteración del ADN y desarrollo del cáncer de piel.

Con respecto a la piel
Existe una clasificación universal de la piel que va desde el Tipo 1 (blanca, muy sensible que siempre se quema y nunca se broncea), al Tipo 4 (Marrón oscura o negra, insensible o mínimamente sensible que nunca se quema, sino que se broncea intensamente.) La mayoría de los laboratorios clasifican a los niños dentro del grupo 1 y otros los denominan simplemente como “piel infantil.”

Como saber si sufres de quemaduras de sol
Cuando una persona presenta quemaduras a causa del sol se presentan síntomas de mareo, nauseas, dolores estomacales y fiebre. También aparecen ampollas en la piel y queda hipersensible al medio ambiente propiciando las infecciones.