Lléname con el Amor de Dios, con la llama ardiente del Amor de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, con el amor de todos los ángeles y santos.

(Autor: José de Jesús y María)

Señora y Madre mía. Yo me ofrezco todo a ti; y en prueba de mi filial afecto te consagro en este día: mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser.
Ya que soy todo tuyo, Madre de bondad, guárdame y defiéndeme como cosa y posesión tuya.

Amén.

San José bendito tú has sido el árbol elegido por Dios no para dar fruto, sino para dar sombra. Sombra protectora de María, tu esposa; sombra de Jesús, que te llamó Padre y al que te entregaste del todo. Tu vida, tejida de trabajo y de silencio, me enseña a ser fiel en todas las situaciones; me enseña, sobre todo, a esperar en la oscuridad. Siete dolores y siete gozos resumen tu existencia: fueron los gozos de Cristo y María, expresión de tu donación sin límites. Que tu ejemplo de hombre justo y bueno me acompañe en todo momento para saber florecer allí donde la voluntad de Dios me ha plantado. Amén.

Siempre y en todo momento, pedirle a Dios permiso. Pedir su protección antes de salir de la casa, en el trabajo, en el estudio, siempre pedirle a él que no falte la comida, todo lo que tenemos que hacer y decir que eres llevado por los hilos de Dios. Dar las gracias por lo que tenemos y por lo que él nos ofrece, y que tengan en cuenta la cruz, lo que significa, que tenemos que tener le mente en Dios. Por esta razón siempre se debe tomar como un hábito de vida el pedirle que nos acompañe a todos lados que vamos, ya sea a un lugar simple, pero hacerlo siempre y estarás protegida/o por siempre. Las cosas con Dios son mejores son de calidad, de amor y veras resultados sorprendentes con esta conexión. Haz oraciones hablando como si lo vieras porque el te ve y ve todo lo que haces, así que ojo. Bendiciones para todos los que lean esto, sirve mucho estar con Dios en todo y ofrecerle todo lo que posees, porque él es él que lo cuida, tu no tienes nada solo estas de paso, es todo de Dios nada es nuestro, cuando comprendan esto, cuantos errores van a dejar de cometerse y van a dejar de competir para ver quien tiene mas o menos, eso no existe, nadie es mas que nadie todos tenemos un solo padre y es Jesús y todos somos hermanos, aunque no de sangre, pero somos de él, por eso Jesús te dará mucho, mas de lo que crees cuando practiques el pedirle de corazón, sabrás la diferencia y verás que la vida es hermosa al lado de él y cuando tengas metas primero pregunta Dios y pídele permiso y verás si es el camino que quiere para ti o tal vez, sino lo es él te lo cambiará el camino porque él te guía para lo mejor.