Los fertilizantes naturales, el compost y los materiales orgánicos fomentan el crecimiento de las lombrices nativas. Las lombrices son cultivadoras naturales y condicionadoras de suelo y fabrican un fertilizante excelente.

Evita el calor fuerte o las heladas. A muchas plantas de interior les gusta estar al aire libre en verano, pero debes chequear que las heladas hayan terminado primero. No compres plantas que hayan estado en el frío. Ya que ellas pueden haberse congelado.

Con un termómetro para plantas puedes determinar fácilmente cuando una planta necesita agua, pero si esa es una herramienta que solo los jardineros tienen puedes determinarlo tocando debajo de la tierra que cubre la parte de arriba, a veces aunque la cubierta este seca debajo podría aun estar húmedos, pero si esta seco completamente, entonces necesita riego. Como regla general las plantas que están expuestas a mucha luz van a necesitar ser regadas más frecuentemente que aquellas mantenidas en lugares levemente más oscuros.

Ser protectivo en la etapa de almacigo. Una vez que la semilla brota, ellas están en la etapa de plantones en que son vulnerables. En este punto, es tu obligación el cuidarlas. Mantener el suelo húmedo, pero evitar la tentación de fertilizarlo hasta que veas las dos primeras hojas. (Aquellas primeras hojas que emergen son parte de la semilla misma.) El fertilizar semillas recién brotadas es delicado puede que no resulte bien o que sea dañino. El esperar el primer set de hojas es un hito en el desarrollo de la flor o planta que señala que es tiempo para un cambio en la dieta.