La defensa en el boxeo #10888
Sin duda, la defensa es una parte esencial que debe dominar un boxeador. Por sí misma la posición de guardia es una postura de defensa pasiva, toda vez que los brazos adoptan la actitud de protección de zonas vulnerables del púgil y al mismo tiempo interceptan o desvían los golpes del adversario. Incluso la posición de piernas permite los desplazamientos de retroceso o laterales que son parte de la defensa del boxeador. Existe también la defensa activa pero eso es más para boxeadores profesionales y tomará más tiempo dominarla.
La guardia amateur, es más frontal y cerrada dada la necesidad de golpeo más continuo con ambas manos. El puño izquierdo debe estar a la altura del hombro y éste se mantiene elevado para evitar la posibilidad de golpes laterales.
El codo debe quedar situado a una distancia intermedia entre puño y hombro, es decir, el brazo debe formar una V, que tenga un ángulo entre 30 y 45º, y en vertical. El puño debe quedar a la misma altura del hombro. Sin contraer músculos.
Es un defecto muy acusado la tendencia a la verticalidad exagerada del antebrazo, toda vez que para la extensión del brazo deben realizarse en ese caso, dos movimientos, el primero para situar el antebrazo en posición de disparo y el segundo para elevar el codo en tanto realizamos la rotación del antebrazo para alinear las articulaciones (hombro codo, muñeca) y situar el puño en posición correcta de impacto.
Siendo, como es, un objetivo prioritario la economía de movimientos, para alcanzar una técnica correcta, se debe adoptar en la posición de guardia una postura correcta del brazo, como antes decimos, en V, en la que no haya que vencer la resistencia de los músculos antagonistas para proceder a la extensión total, permitiendo alcanzar la máxima velocidad y la contracción muscular violenta en el momento final del impacto, que es lo que determinará la potencia del golpe (sin olvidar, el ligero giro impulsor de pie, cadera y hombro, para aplicar el peso total en el punto de impacto.)
El brazo derecho, se situará ligeramente más retrasado, a la misma altura del hombro izquierdo, adelantado al mentón y lateral a éste, con una distancia aproximada a la del dedo pulgar extendido. El codo se separará unos centímetros de la zona hepática al objeto de evitar la transmisión del efecto de cualquier golpe al cuerpo que al ser bloqueado con este brazo pudiera llegar a empujar lo suficiente al mismo de manera que su choque pudiera alcanzar la zona vulnerable del hígado.
La posición de guardia debe permitirnos la realización de todos los movimientos ofensivos y defensivos, es decir tanto las esquivas y desplazamientos, como las paradas, desviaciones y bloqueos de los golpes del rival, de manera que conservemos el equilibrio repartido en todo momento en ambas piernas, asegurando una correcta ejecución de nuestros golpes o haciendo posible el encadenamiento sucesivo de estos en las combinaciones.
Dependiendo en gran manera de las características morfológicas del individuo (longitud de brazos, de cuello, forma de los hombros, desarrollo pectoral, etc.) tendremos aparentemente diferentes formas de guardia aún cuando hayamos partido de los mismos principios fundamentales y básicos.
(Recuerda que siempre debes consultar con un entrenador profesionallos diferentes tipos de defensa si practicas boxeo.)
|
|